No es lo que se anuncia, primeramente pone aparcamiento vigilado, y resulta que tiene un patio con posibilidad de albergar 2 vehículos y resulta que uno es ocupado por el del propietario, que vive en el primer piso y el otro solo lo deja a los que alquila en el piso de abajo. A nosotros nos dijo literalmente, ahí en la calle tenéis hueco cuando previamente en la reserva me dijo que tenía "mi sitio allí". Sin palabras nos quedamos, y luego la "puntilla" fue que nos alquiló la buhardilla, cuando en el anuncio no refleja que es una casa de 2 plantas, un bajo, el piso primero donde vive el propietario y la dichosa buhardilla que nos alquiló. Que para llegar a ella hay que subir 50 escalones, y mira que le dije que íbamos con un niño pequeño. Tela marinera para subir las maletas y la poca compra que hicimos. Eso se debe especificar en el anuncio, pero no contentos con ésto, nos encontramos que el lavavajillas dice "estar roto", casi no llega el agua corriente, un hilito sube que Dios y ayuda para fregar los platos. La lavadora es pésima, no coge apenas agua.Para más Inri solo nos da para 9 días 2 toallas de ducha, 2 de lavabo y un solo juego de sábanas, de chiste. Las camas en sí no son incómodas, pero el somier de hierro que tienen chirrían que es insoportable el ruido que producen al moverse en la noche. El alojamiento no cuenta ni con jabón de manos, jabón fregar platos, detergente, papel higiénico, rasqueta vitro... Lo más básico. Y mira que llevamos años hospedándonos en viviendas, pero así en ninguna. Y menos mal que no nos hizo calor que sino nos achicharramos, buhardilla, techo de madera, sin ventilador de techo, aire acondicionado... La gente se cree que vale todo para alquilar una casa, nos sentimos muy decepcionados. Vaya decepción. Deseando estaba regresar a mi casa.